En México y en toda Centroamérica, la presencia de una blusa elaborada con las más fascinantes formas de hacer arte sobre tela es el huipil, palabra náhualt que sirve para designar a esta prenda, tan femenina como antigua.
En El salvador, sin embargo, se le llama del mismo modo a una enagua o falda que usan preferentemente las mujeres indígenas, o las que no lo son y un día quieren vestir de otro modo.
Para hacer un huipil hace falta utilizar varios lienzos que serán unidos entre sí con ribetes, telas de otro color o bordados hechos a mano y consiste en una tela rectangular o cuadrada, con una abertura para introducir la cabeza y una salida para cada brazo.
De acuerdo con los gustos, el escote puede ser redondo, ovalado, cuadrado o simplemente una abertura vertical, y es el algodón el material más empleado, aunque también hay huipiles de lana y de seda.
Los detalles están en el arte y la originalidad para hacer de estas amplias blusas una pieza única, y en este empeño, cada grupo indígena confecciona y decora su huipil de manera característica.
Los usados por las mujeres de Yalalag, en Oaxaca, México, llevan trenzas largas hechas de cintas de colores vivos en la espalda y el pecho, mientras que las chinantecas emplean motivos geométricos, decoran las orillas con una franja horizontal de listones y los rematan con encajes.
Existen también huipiles propios para ceremonias, y entre todos, destacan los que se usan en algunas zonas de los Altos de Chiapas y que se enriquecen con plumas blancas entretejidas a la altura del pecho y en el borde interior.
Para algunas fiestas de importancia más elevada, algunas mujeres mexicanas y centroamericanas usan dos huipiles al mismo tiempo, pero uno de ellos va colocado con una gracia muy difícil de imitar, sobre la cabeza.
Los bordados de los huipiles significan mucho más de lo que la elaborada decoración deja ver a simple vista: son historias que hablan de un grandioso pasado, identifican a cada grupo y transmiten señales que prácticamente saben identificar los que tienen el privilegio de ser parte de esa riqueza cultural que viene del abuelo, del abuelo del abuelo, y nos llega con sus misterios hasta hoy. (AIN)
El blog de María Elena 
El huipil es una prenda artistica que puede llevar mucho tiempo de trabajo y los huipiles son hechos a mano.