Por Eduardo Rodriguez-Baz
Madrid, 22 sep (PL).— La danza es mi vida, le debo todo, fue la frase lapidaria que utilizó hoy aquí la directora del Ballet Nacional de Cuba (BNC), Alicia Alonso, para refrendar su imperecedero pacto de amor con el baile.
Me mantendrá (la danza) viva todos los años que pienso vivir, y son muchos, aseguró Alonso en tono afable, durante la presentación de las actuaciones que su prestigiosa compañía iniciará mañana en los Teatros del Canal, de la capital española.
Considerada una de las figuras cimeras en la historia del ballet clásico, la coreógrafa confesó que eso es, precisamente, lo mejor que ha hecho en su vida, de lo que más sabe y puede aportar a las nuevas generaciones de bailarines.
A una pregunta de Prensa Latina, la prima ballerina assoluta destacó la influencia de la cultura española en la escuela cubana de ballet.
Flanqueada por su esposo y director del Museo de la Danza de la isla caribeña, Pedro Simón, quien en ocasiones complementó sus respuestas a los periodistas, Alonso recordó que en muchas obras del repertorio del BNC está presenté la nación ibérica.
En esa línea mencionó Preciosa y el aire, ballet corto montado por ella misma en el que se narra el poema homónimo de Federico García Lorca, Serenata goyesca y Bodas de sangre, con coreografía de Antonio Gades.
También se refirió al Festival La Huella de España, iniciativa nacida en 1988 y cuya XXIII edición, celebrada en mayo pasado, estuvo dedicada a la comunidad autónoma de Castilla y León.
Tenemos muchas obras que por su estilo tienen mucho que ver con el folclore de España, remarcó.
Entrando en materia conversó, visiblemente emocionada, sobre La Cenicienta y El lago de los cisnes, las dos coreografías clásicas que acogerán, por primera vez, los Teatros del Canal.
Abrimos con este cuento precioso, una lucha, trabaja y logra algo, eso para mi es la cenicienta, señaló respecto a la única música de Johann Strauss compuesta expresamente para un ballet.
El coreógrafo cubano Pedro Consuegra presentó por primera vez una versión de esta obra en 1988.
Para el Ballet Nacional de Cuba, Consuegra revisó sustancialmente esa coreografía y enriqueció los aspectos técnicos y dramáticos.
Esta nueva puesta en escena, dirigida por la reconocida bailarina, fue estrenada en La Habana en 1996.
En la versión de El lago de los cisnes creada por Alicia Alonso, la conocida estructura argumental, coreográfica y musical Petipa-Ivánov-Tchaikovsky se sintetiza en tres actos y un epílogo.
Es la obra maestra de la historia del ballet, y el BNC, modestia aparte, la baila muy bien, indicó su directora.
Ambas forman parte de la gira con la cual la compañía de la nación antillana celebra su aniversario 65.
Como cierre de una espléndida y soleada mañana, reporteros y crítica especializada disfrutaron de un ensayo abierto de La Cenicienta con las primeras figuras del Ballet Nacional de Cuba.
Tras una primera escala en Barcelona y su paso por Madrid, el recorrido del BNC abarcará un abanico de escenarios y ciudades de lustre, entre ellas Toledo, Valladolid, Salamanca, Oviedo, Santiago de Compostela, Bilbao y San Sebastián.
(Fuente: Prensa Latina)