Por David Brooks/La Jornada
La Cumbre sobre el Clima emitió una serie de compromisos y declaraciones, todas no vinculantes. Entre las más destacadas están las siguientes:
Bosques: La Declaración de Nueva York, en la cual mandatarios, líderes de empresas transnacionales, fondos de inversión y organizaciones ambientalistas se comprometen a frenar la pérdida de los bosques naturales del mundo para 2030. Entre los objetivos está reducir a la mitad la tasa de deforestación para finales de esta década. Afirmaron que este esfuerzo, para 2030, tendrá un resultado equivalente a quitar todos los automóviles del mundo de las calles. A la vez, se promete intentar restaurar 350 millones de hectáreas para finales de la próxima década, una superficie mayor a la de India. La deforestación representa alrededor del 8 por ciento de las emisiones de carbono, según investigaciones. Sin embargo, se reportó que Brasil –país amazónico– no participó en esta negociación.
Bancos: El sector financiero buscará movilizar 200 mil millones hacia finales de 2015 para enfrentar el cambio climático en países en desarrollo al financiar programas de reducción de emisiones.
Impuestos al carbono: Unas 400 empresas de 60 países firmaron un compromiso en apoyo de imponer un precio sobre el carbono.
Hidrocarburos: Empresas petroleras transnacionales, junto con países productores de hidrocarburos, entre otros, anunciaron que lanzarán un «plan de impacto inmediato» para reducir emisiones de gas metano.
Agroindustria: Mandatarios, empresas transnacionales y organizaciones no gubernamentales anunciaron compromisos para transformar prácticas agrarias al incrementar la productividad y, al mismo tiempo, reducir emisiones de carbono.
Transporte: Se anunciaron cuatro iniciativas que impulsan cambios en el sector de transporte para lograr reducir emisiones de carbono.