Por Arnaldo Musa
El primer semestre de este año pasó a la historia por el negativo récord de los desastres naturales.
«Las naciones más ricas necesitan desesperadamente que los pobres consuman, de lo contrario se paralizarían sus centros productores de bienes y servicios. Que utilicen sus computadoras para calcular cuántos millones de millones deben invertir para que las naciones pobres se desarrollen sin destruir la ecología y la vida en nuestro planeta», concluye una carta enviada por nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro, al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, publicada en una de sus recientes Reflexiones.
Y es que los problemas inherentes a los cambios en la naturaleza son agravados por las ambiciones depredadoras del hombre.
Ello ha sido particularmente intenso este año, principalmente en el primer semestre, que pasó a la historia por el negativo récord de los desastres naturales.