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Bebo y Chucho: Unidos para siempre

Este 9 de octubre Cuba celebra el nacimiento de dos grandes pianistas: Dionisio Ramón Emilio (Bebo) Valdés Amaro y su hijo Dionisio Jesús (Chucho) Valdés Rodríguez, dos grandes del jazz afrocubano.

Por Rayma Elena

Bebo y Chucho Valdés.

Bebo y Chucho Valdés.

No sabía que al piano le habían nacido dos reyes en Cuba el mismo día: 9 de octubre; en el mismo lugar: Quivicán; el padre en 1918, y veintitrés escalas después, en 1941, su sucesor.

Tecleo mi ignorancia, aunque suene como un pésimo acorde al oído de un buen músico. Más, si bastarían sus nombres para entrever la coincidencia: Dionisio Ramón Emilio Valdés Amaro y su hijo Dionisio Jesús Valdés Rodríguez.

Pero soy cubana nacida en una época que «empolilló» los santorales y trocó la palabra onomástico en cumpleaños o aniversario. Y si algo mitiga un tanto la pena por esta laguna de conocimiento, es que viví en un hogar libre de exilios musicales (excepto por cuestiones de lesa calidad), y a pesar del largo silencio que enmudeció el piano de Bebo Valdés para gran parte de mi generación, pude saber temprano que Chucho venía de esa raíz profundamente anclada en la Isla.

Ninguno de los Valdés necesitaba más que un apodo de dos notas para ser reconocido en todo el mundo. Chucho y Bebo, así los nombro, ateniéndome solo a la cronología de mis recuerdos, porque fue el hijo quien me llevó al padre. Sigue leyendo

Ignacio Villa, cantante, pianista y compositor cubano

VillaIgnacio Villa nació en Guanabacoa el 11 de septiembre de 1911.

Rita Montaner lo bautizó como Bola de Nieve, aludiendo irónicamente a su tez negra y a su cuerpo redondo.

Comenzó actuando en un cine silente de su villa natal, Guanabacoa.

En 1933 trabajó en México, acompañando al piano a Rita Montaner. Había estudiado música desde los ocho años, en el Conservatorio Mateu, en Guanabacoa; luego estuvo en otros centros musicales capitalinos.

Cursó estudios de magisterio, por la década del treinta, en la Escuela Normal de La Habana.

El gran “Bola” unía a sus dotes de cantante y pianista, la de compositor de piezas memorables. Como cantante mostró un estilo original, una manera personalísima de interpretar la canción.

Viajó ininterrumpidamente por casi todo el mundo. Autor de las canciones “Si me pudieras querer”, “Ay, amor”, “Tú me has de querer”, “Señor, ¿por qué?” Interpretó en distintos idiomas: catalán, inglés, francés, italiano y portugués.

Murió en Ciudad México, el 2 de octubre de 1971. Sus restos fueron trasladados a Cuba y sepultados en su ciudad natal.

(Fuente: Portal Cubarte)

A continuación, la letra de Si me pudieras querer, una de sus más bellas canciones:

Despertaste nueva vida en mí
para ser faro de mi querer
y hoy me tienes medio loco
porque ya siquiera un poco
has de alumbrar mi ilusión.

Hoy la vida me ha de sonreír,
tengo ya deseos de sentir
los besitos de tu boca
que mejor me hacen vivir.

Si me pudieras querer
como te estoy queriendo yo,
si no me fuera traidora la luz de tu amor,
yo no sé si existiera por ti
solo mi querer,
yo no sé qué sería la vida sin ti.

Pero no quiero pensar que nunca me podrás amar
porque la vida no quiere
y nada más,
deja que Dios o que el destino quiera
y entonces la vida también lo querrá.